Tras presentar al mundo los kits de comida sana y un revolucionario servicio de flores, Maartje y Patrick se lanzaron a la búsqueda de formas nuevas e inspiradoras de influir en las rutinas diarias de la gente. Como apasionados creyentes en el poder de los productos bien pensados, se preguntaron: ¿dónde podemos marcar una verdadera diferencia? Decidieron que no hay rutina más sutilmente impactante que la del cuidado personal. Acordaron que estos productos tenían el potencial de ser asequibles, lujosos y sostenibles, a la vez que lucían con estilo en la encimera de tu cocina.
En colaboración con una fábrica local de jabón de Frisia, curiosos equipos de I+D, entrometidos perfumistas holandeses-franceses y un dedicado diseñador de productos, se embarcaron en la misión de transformar la industria. Probaron, juguetearon y formularon, desde la fragancia a la espuma y desde la textura al cosquilleo, asegurándose de que cada aspecto fuera nada menos que perfecto. Pusieron a punto su botella rellenable y diseñaron bolsas reciclables para cerrar el ciclo. Recorrieron bosques, praderas y jardines botánicos en busca de ingredientes naturales que pudieran calmar, aliviar y restaurar.
